Cada 3 de junio se celebra el día mundial del sommelier ya que, ese día, en 1969 fue creada la Asociación Internacional de la Sommellerie (ASI), que actualmente agrupa entidades de más de 50 países en los 5 continentes; y que, además, está presidida por Andrés Rosberg, argentino y pionero en la sommellerie de nuestro país.
Hace más de 10 años cuando me recibí de sommelier al pronunciar la palabra de mi nueva profesión (ya que era periodista hacía varios años atrás) solía recibir una catarata de gestos rarísimos o largos silencios que pedían a gritos un poco de información extra ya que nadie tenía mucha idea de qué se trataba esto de ser sommelier. Recuerdo cómo algunos solían hacer el mismo chiste una y otra vez, diciéndome ahí viene “el sommier”, claro juego de palabras con la cama/sommier , que de más está de decir que a mí no me causaba ninguna gracia. Hoy con unos 20 años de historia, la profesión se encuentra super posicionada como un eslabón fundamental en la cadena de valor de la industria vitivinícola.
Pero ¿de qué hablamos cuando hablamos del sommelier? Es la persona que por sus estudios, conocimientos y experiencia es especialista en bebidas, incluyendo aguas, infusiones, destilados, licores pero, por sobre todo, vinos. Su función en un hotel o restaurante es seleccionar vinos, comprarlos, estibarlos, confeccionar y mantener actualizada la carta, controlar la rotación de inventarios, asesorar a los comensales tanto en la elección del producto como en su interacción con los platos; y, al mismo tiempo, también es la persona responsable del correcto servicio de las bebidas durante una comida.
El sommelier más clásico, por así decir, cuando nació la profesión siempre lo podíamos imaginar trabajando en el servicio de un restaurante, hotel, bar o bodega. Actualmente el rol del sommelier es mucho más amplio ya que también hay sommeliers en otros ámbitos, como en la organización de catas, la comercialización de vinos en bodegas y vinotecas, el turismo, las capacitaciones profesionales, la docencia, la organización de eventos, la prensa especializada o en la difusión y degustación de otro tipos de productos más allá del vino como, por ejemplo, el café, los destilados, el té, el aceite de oliva y, en la Argentina obviamente, hasta la yerba mate. Básicamente los sommeliers degustamos todo lo que se nos cruce dentro de una copa o arriba de un plato. Entrenamos sensorialmente para aprender y, de esa forma, con la experiencia como motor fundamental de la cata, recomendar. Es imposible recomendar algo que una no probó.
Por otro lado, ¿sabías que los sommeliers también tenemos concursos y mundiales? Claramente, nuestro mundiales son sin pelota pero siempre ¡con copa en mano! La Asociación Argentina de Sommeliers (AAS) organiza el concurso “Mejor Sommelier de la Argentina” en donde el ganador del certamen teórico y práctico tiene pasaporte directo para representar al país en el Concurso Mejor Sommelier de las Américas y en elConcurso ASI Mejor Sommelier del Mundo; que este marzo se realizó en Bélgica y Martín Bruno, sommelier argentino quedó, entre los quince mejores del mundo.
Si querés aprender a disfrutar el vino podés sumarte a algún curso corto o intensivo de vinos. Pero si tenés ganas de zambullirte al 100 por ciento en este fascinante mundo del vino y, hasta quizá encontrar una vocación o profesión, podés estudiar la carrera de sommelier. Y aclaro carrera porque más allá de que obviamente se descorcha muchísimo a lo largo de la cursada también vale la aclaración de que hay que estudiar bastante ya que detrás de cada botella de vino hay mucho, mucho por contar. Y de alguna forma un sommelier es un comunicador profesional del vino que tiene que saber sobre variedades de uvas, procesos de elaboración, regiones, suelos, climas y maridajes entre tantos apasionantes temas que se profundizan a lo largo la carrera.
En la Argentina actualmente hay cuatro escuelas con título oficial:
Centro Argentino de Vinos y Espirituosas (CAVE), Juncal 838, CABA. Mail: [email protected].
Escuela Argentina de Sommeliers (EAS) Maipú 943, 1º piso, CABA (también presente en Mendoza, San José de Costa Rica y Panamá). Mail: [email protected]
Escuela Argentina de Vinos (EAV), Gorostiaga 1693, CABA. Mail: [email protected]
Gato Dumas Colegio de Gastronomía, Av Córdoba 1751, CABA. Mail: [email protected]
Si el bichito del vino ya te picó y sentís que comunicar este apasionante mundo es lo tuyo ¡no lo dudes más! Elegí la escuela, anotate y ¡muy pronto brindaremos y celebraremos nuestro día juntas!