Los supermercados chinos siempre nos quedan a la vuelta de la esquina. Tienen ofertones increíbles y nos suelen sacar de apuros. Pero, ¿comprar o no comprar vinos en el chino? Esa la cuestión.
Uno de los mitos del mundo del vino dice que los vinos que venden los supermercados chinos son robados. Este mito, como todos los mitos, no tiene fundamento en ningún hecho empírico, pero circula desde hace años por todos lados. Según el mito, ese motivo es una de las principales razones por las cuales los supermercados chinos ofrecen precios super competitivos y hasta muchas veces podemos encontrar vinos más baratos que en otros canales de distribución. Claramente es un mito y no una realidad ya que sino semana a semana deberíamos encontrar con placa roja alguna noticia que nos anuncie que un nuevo camión que transporta vino fue robado en alguna ruta y que se desconoce el paradero de los productos.
La realidad nos demuestra que en el supermercado chino -que me animo a arriesgar que todas tenemos uno a la vuelta de la esquina- podemos encontrar una grandísima variedad de vinos. La cercanía es vital, ya que muchas veces definimos a último momento qué vamos a comer o nos cae gente de improviso a casa. La cercanía sumado a que suelen cerrar más tarde que otros comercios, son muchas veces grandes aliados para comprar vinos. Claro que en el supermercado chino los vinos no los van a encontrar ordenados por bodega, variedad, estilos ni van a tener maridajes sugeridos pero les aseguro que van a poder encontrar muy buenos vinos a excelentes precios. De hecho últimamente las góndolas de vinos de los supermercados chinos han crecido de forma exponencial: se multiplican etiquetas de vinos blancos, rosados, tintos y espumantes. Y en muchos hasta podrán encontrar vinos de muchísimas regiones del país.
¿Cómo saber qué comprar para no clavarnos con un vino? Desde ya les cuento que eso puede suceder con un vino que compramos en cualquier lado: vinoteca, cadena de supermercado y hasta la bodega. Ya que muchas veces los consumidores castigamos a los vinos porque no nos gustan y en lugar de decir: “este vino no me gustó”; muchas veces decimos “este vino no está bueno”. La sentencia es muy parecida pero una hace referencia al gusto personal ¡y claro que algo puede o no gustarnos! Ya hemos escuchado miles de veces que sobre gustos no hay nada escrito. Pero cuando una afirma tan radicalmente que algo no tiene los estándares de calidad necesarios para estar a la venta (sea donde sea); ahí queridas amigas indefectiblemente deberemos justificar esa afirmación. Porque ya no es una cuestión subjetiva de gustos, sino que estamos (des) calificando al producto.
Volviendo a la pregunta inicial lo que recomiendo siempre comprar en los supermercados chinos son los vinos para todos los días, los vinos entre $100 y $300 / $400 que les aseguro que tienen alta rotación, es decir, que no quedan de clavo en el super y que podríamos empezar a dudar ya sea cómo fue guardado o desde cuándo está ahí. Porque imaginemos que un vino queda en la góndola esperando que lo inviten a algún asado o cena y eso no sucede a lo largo de un tiempo largo. Ese vino les aviso que estuvo en posición vertical , expuesto a la luz y los cambios climáticos del lugar. No tuvo la mejor guarda de su vida. Por eso, cuando compremos un vino en el super siempre siempre dejen el de adelante de todo en exposición y lleven alguna botella de más atrás. Lo mismo que seguramente muchas hacen cuando compran desodorantes ya que el de adelante de todo es el que siempre se usa para probar el aroma y si te llevás ese, ¡seguramente estará por la mitad! Claro que el vino estará enterito, pero es mejor llevar el que está escondido en las sombras, sin tanta exposición a la luz y al calor.
¿Añadas viejas? Si vas al super mejor que no. Estamos empezando el 2020, así que les diría que idealmente no lleven vinos del 2017 para atrás. Si son fanáticas del vino y les gusta comprar etiquetas para guardar: su lugar es la vinoteca. Ahí van a tener asesoramiento y guarda garantizada, de hecho muchos vinos a veces están en cavas climatizadas.
Si un día no van en busca de vinos, igual les recomiendo que visiten la góndola del vino ya que suelen hacer grandes ofertones y quizá te llevás una botella que querías probar (o volver a tomar) a un mejor precio del que suele estar a la venta.
¡Ah, si son de las más clásicas! El super siempre tiene los clásicos de clásicos, esas etiquetas que suelen ser las elegidas para llevar a una cita o a un asado con los suegros, cuando no quieren arriesgar nada con la elección del vino. Pero anímense a revolver cada estante del super chino cuando quieran lanzarse a la aventura de probar vinos que no conozcan. De hecho hay muchas etiquetas que aparecen y les van a dar la posibilidad de probar cosas nuevas a buenos precios.
¡Y si hablamos de vinos del chino las invito a todas que sigan en Instagram a los chicos de Vinos de Chinos que semana a semana suben recomendaciones con coordenadas exactas para que se animen a probar vinos distintos a precios super razonables!
Nota originalmente redactada para Soy Mujer.
por Mariana Gil Juncal.
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